Las legumbres no son solo para el invierno. Esta ensalada de alubias con pesto de rúcula te permitirá disfrutar de todo su sabor y propiedades nutricionales, en cualquier época del año

Intro receta:

Hace años que las legumbres dejaron de ser ingrediente exclusivo de la cocina tradicional que preparaban nuestras madres y abuelas y, poco a poco, se han ido incorporando a nuevas y desenfadadas recetas. Lentejas, garbanzos, alubias… las legumbres gozan de una segunda juventud en ensaladas y platos veganos de todo tipo.

Y es que, más allá de los guisos tradicionales y de los platos de cuchara tan típicos de invierno, las legumbres pueden cocinarse de diferentes formas para poder disfrutar al máximo de todo su sabor y de sus propiedades nutricionales en cualquier época del año.

Por su alto contenido en proteínas, pueden llegar a ser un sustituto de la carne muy saludable en dietas vegetarianas y veganas, ya que la carne contiene más grasa y colesterol. Además, las legumbres tienen bajo contenido de grasa, no contienen colesterol y son ricas en potasio, hierro y magnesio, así como en grasas saludables y fibra soluble e insoluble.

Beneficios que hace de ellas un verdadero “superalimento” y un producto que no puede faltar en nuestra dieta. Los expertos en nutrición recomiendan comer al menos de dos a cuatro raciones de legumbres a la semana.

Una forma original y muy saludable es comerla en ensaladas y platos fríos, como esta deliciosa ensalada de alubias con pesto de rúcula, que hemos aderezado con aceitunas negras con hueso Fragata. La clave es asar los tomates en su punto justo y elaborar el pesto con mimo; el resto, es coser y cantar.