Cómo preparar las mejores gildas - Aceitunas Fragata
Preparar gildas con aceitunas Fragata

Dicen que a mediados del siglo pasado, en una bodega del País Vasco, a uno de los clientes habituales le dio por ensartar en un palillo de dientes una aceituna, una anchoa y una guindilla. El cliente en cuestión había pedido las tres tapas por separado pero, ya sea por azar o por curiosidad, estaba a punto de crear un aperitivo que perduraría hasta nuestros días: la Gilda.

De esta manera explican algunas fuentes el nacimiento de una de las tapas más típicas del norte de España que, poco a poco, se fue extendiendo por otras regiones y que hoy en día está presente en todas partes.

Las Gildas deben su nombre al mítico personaje encarnado por la actriz Rita Hayworth en la película “Gilda” de 1946, ya que la banderilla es "salada, verde y un poco picante", como la protagonista del filme.

Este particular aperitivo es un encurtido que combina la aceituna y la guindilla con una conserva de pescado, generalmente anchoas, unidas por un palillo. Su sabor es fuerte y ácido, lo que lo hace ideal para su consumo como entrante acompañado de vino.

Pero, además, es una receta sencillísima de preparar en casa y una verdadera todoterreno, ideal como aperitivo en una cena entre amigos o como acompañante en un almuerzo ligero. ¿Quieres saber cómo prepararlas?

Apenas necesitarás diez minutos y unos ingredientes muy fáciles de encontrar: guindilla, anchoas y aceitunas Fragata. Por ejemplo, puedes usar aceitunas manzanilla verde si hueso, de sabor suave y con una textura firme. Además de todo esto, necesitarás aceite de oliva y palillos o brochetas.

Para comenzar, dispón todos los ingredientes alrededor de una tabla, de manera que puedas trabajar más rápidamente y montar las gildas sin complicaciones. Prepara unas brochetas o palillos de aperitivo y una bandeja o fuente donde servir los pinchos.

Escurre las guindillas si vienen en líquido de conserva y córtales el rabito. Las puedes cortar en varios trozos o dejarlas enteras, según el tamaño que tengan. Escurre también las anchoas y limpia un poco del aceite de la conserva, para poder aliñarlas después con un buen aceite de oliva virgen extra Fragata.

Una vez completados estos pasos, ya estás listo para empezar a montar tus gildas. Puedes empezar ensartando una aceituna, un trozo de guindilla y, por último, la anchoa doblada sobre sí misma. Ensarta todos los trozos que quieras, en el orden que quieras.

Una vez terminados de montar los pinchos, te recomendamos aliñarlos con un buen aceite de oliva virgen extra.

Si eres de aquellos que no se conforman con lo clásico y que buscan escapar de la rutina, puedes optar también por versiones más atrevidas de este sencillo aperitivo. ¿Por qué no probar a añadir otros encurtidos Fragata como pepinillos o cebollitas en salmuera? ¿O a darle un toque de ajo o limón? Simplemente déjate llevar por tu imaginación y recuerda que puedes usar el tipo de aceitunas que más te guste, aliñadas, sin hueso o con hueso –como en la receta original-, aunque estas últimas son algo más difíciles de montar y de comer.

Aunque tradicionalmente se consumen en la hora del aperitivo, lo cierto es que las Gildas saben muy bien a casi cualquier hora. Acompañadas de un buen vino o de una refrescante cerveza, de un vaso de sidra o de un vermú, son la tapa ideal para degustar entre amigos y hacer un poco de hambre antes del almuerzo o la cena.

 

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