Hasta hace poco nos sonaba a chino pero hoy lo practican hasta las abuelas más modernas. El brunch es ya la gran tendencia global que llegó para quedarse triunfando a lo grande. No hay hotel o bar de moda que no lo ofrezca en fin de semana pero, ¿por qué no montar un brunch en casa? Te contamos todas las claves para preparar el brunch perfecto, y cómo darle un toque original.
Desayuno, aperitivo o comida, ¿por qué elegir si puedes tenerlo todo?
A estas alturas seguro que ya sabes que la palabra “brunch” es un término inglés que une “breakfast” (desayuno) y “lunch” (comida o almuerzo). Hay varias teorías sobte su origen, pero lo que está claro es que es un invento anglosajón y que dio el despegue definitivo en las cafeterías de moda de Nueva York a principios del nuevo milenio.
Y es que la idea era demasiado buena como para no triunfar: ¿quién no se ha despertado tarde el domingo, con el cuerpo perezoso y ganas de relajarse rodeado de buena comida? Por eso el brunch parece unido a los días de fiesta, cuando el desayuno tardío se confunde con el aperitivo de media mañana y se va alargando hasta la hora de la comida. ¿Solución? ¡Unirlo todo en un banquete para compartir!
Monta tu propio brunch en casa
El problema de las modas es que todo el mundo se apunta y encontrar sitio el domingo parece imposible, por no hablar de que muchos aprovechan para disparar los precios. Por eso te proponemos montar tu propio brunch en casa para festejar el fin de semana a tu gusto, en familia, con amigos o incluso como un momento romántico en pareja.
Solo necesitas un poco de planificación para que salga perfecto. Ten en cuenta el número de comensales, si hay niños o personas con alguna alergia y en cómo quieres organizar el menú. Si sois muchos, lo ideal es un tipo buffet, al estilo del desayuno continental de hotel, pero también puedes optar por una gran mesa de celebración vestida para la ocasión.
Alimentos y platos imprescindibles
Lo bueno que tiene el brunch es que casi todo está permitido, aunque se lleva el menú tipo neoyorquino con algunos alimentos que son casi imprescindibles. Lo importante es no complicarse, ofrecer una buena variedad y combinar platos dulces y salados con alimentos frescos y naturales.
• Zumos y frutas. Los zumos naturales para arrancar son un básico y la fruta puede ser acompañamiento o postre.
• Combinados y bebidas. Espumosos, batidos o smoothies, cafés, tés, cócteles, refrescos y agua fresca.
• Lácteos y embutidos. Yogures y quesos acompañando una buena selección de embutidos. Mejor apostar por calidad antes que cantidad.
• Pan y bollería. Sirven para arrancar el menú como si fuera el desayuno, y pueden ir acompañados de mantequilla, mermeladas y miel.
• Platos salados. Pueden ser más o menos consistentes, desde sándwiches y tostas con ensaladas hasta hamburguesas o pasta. Eso sí, que no falten los huevos, ya sean los clásicos benedictine con su salsa holandesa o en tortilla, revuelto o a la plancha.
• Dulces y postres. Tartas y pastelitos, postres de cuchara, galletas, crepes con nata... hay mucho donde elegir.
Cómo darle un toque original y mediterráneo a tu brunch casero
¿Quieres salirte de lo típico y marcarte un brunch diferente con el que conquistar a tus invitados? No hace falta ser radical ni complicarse con recetas elaboradísimas: apuesta por nuestra cocina más mediterránea para llevar el brunch a nuestro terreno. Toma nota de estas deliciosas ideas:
• Deja los smoothies y empieza el menú con chupitos de gazpacho o salmorejo con una guarnición original, por ejemplo unas aceitunas en rodajas.
• Cambia la bollería extranjera por nuestra repostería más tradicional, como las magdalenas o las ensaimadas, pero en una presentación más elegante con su formato mini. Por ejemplo estas súper originales mini magdalengas saladas.
• Sorprende con platos diferentes pero fáciles, como un carpaccio de bacalao, narajas y aceitunas. Coloca una base fina de bacalao desalado, rodajas de naranja, cebolleta en juliana y unas buenas aceitunas a tu gusto.
• Los postres en vasito son sencillos, quedan de lujo y son cómodos para servir. Por ejemplo, alternando capas de galletas trituradas con una mezcla de queso crema y nata, mermelada de frutas y frutos secos o muesli.
Cualquier excusa es buena para reunirse con los amigos o la familia y organizar un divertido brunch en casa. No hace falta complicarse para seducir con platos apetitosos, y si añades al menú algunas variedades de aceitunas Fragata para picotear, triunfarás seguro.
¿Y tú, ya te has apuntado a la moda de brunchear?
